Consolidar el proyecto

LogoBBLa semana pasada leí en algún medio digital que Salva Guardia tiene un acuerdo por 2 temporadas con el Bilbao Basket. Que el pívot valenciano y el club bilbaíno tendrían que presentar la oferta ante la ACB, ya que el jugador está sometido al derecho de tanteo por su equipo, el Alta Gestión Fuenlabrada, por lo que habría que esperar a ver si el club madrileño iguala la oferta para poder hacer efectivo el fichaje.

La misma noticia indicaba que el club de La Casilla se había interesado también por Blagota Sekulic. Que el pívot montenegrino era la primera opción pero al no recibir una respuesta positiva, los directivos bilbaínos habían intensificado las negociaciones con Guardia para conseguir su contratación, que llegará finalmente si el Fuenlabrada no se interpone.

El Bilbao Basket presentó anteayer sábado sus ofertas por Guardia y Huertas ante la ACB quien a su vez dará traslado de las mismas a los clubes de origen de los jugadores. A partir de ahí dispondrán de 10 días para igualar las mencionadas ofertas, en caso contrario los jugadores vestirán de negro la próxima temporada.

La noticia me dejó un poco perplejo y a la vez asustado. Si Salva Guardia es la alternativa a Blagota Sekulic, prefiero no saber, y espero no enterarme nunca, en quien había pensado el club como alternativa al rocoso pívot valenciano si éste también optaba por rechazar la oferta. Y esto lo digo con todos mis respetos hacia Salva Guardia, no seré yo quien ponga en duda su profesionalidad o valía para este deporte.

Pero es que pienso que no hay color entre un jugador y otro. Sus números, la temporada pasada, han sido parecidos, es cierto, pero Sekulic me parece un pívot que está en progresión en su juego, todavía no ha explotado todo su potencial, y puede ser titular en un equipo como el nuestro. En la temporada 06-07 promedió 11,2 puntos y 6,5 rebotes, en ULEB, con PAOK y Real Madrid, equipo con el que se proclamaría campeón. Guardia, en cambio, es un especialista en el trabajo sucio y a su edad no se espera que tenga margen de mejora en su juego. Sekulic tiene 26 años y Guardia 34.

Si Guardia acaba viniendo aquí, como así parece, el juego interior de esta temporada, con Weis, Banic, Pasalic y Guardia, se me antoja flojito, más que el que tuvo el equipo la pasada campaña. Rancik tendrá sus cosas, como todos, pero me parece un jugador más completo y versátil que Guardia.

La llegada del nuevo hombre de negro nos lleva a otra cuestión que empieza a preocuparme, la edad de los jugadores de nuestro equipo. Savovic tiene 32 años, Weis 31 y Recker 30. El año pasado llegaron Paco Vázquez que tiene 34, y Quincy Lewis que ya está en 31. Huertas tiene 25 y casi seguro seguirá aquí la temporada que viene, pero después se irá. Y finalmente nos quedan Salgado con 28, Pasalic con 24 y Banic con 23. Y esta temporada llegará Guardia con 34.

springfieldEsto quiere decir que tenemos media plantilla por encima de los 30 y que el club va a tener que afrontar a corto plazo una reestructuración importante en el vestuario lo que va a ir en detrimento de la continuidad del proyecto. En este asunto deberíamos tomar buena nota del Baskonia, un club que carece de cantera pero siempre está a la búsqueda de nuevos y jóvenes talentos. Los ficha, los cede a otros equipos para que los vayan haciendo como jugadores, a fuego lento, y cuando ya están listos los incorpora a su equipo. Este año recuperan a Goran Dragíc, cedido al Olimpija Ljubliana y a Stanko Barac, cedido al Pamesa. Además tienen a Matías Nocedal que se está formando en LEB, y han estado a punto de fichar a Nicolo Melli, un 3-4 de 17 años, la nueva joya italiana. El Bilbao Basket tiene mucho que aprender del scouting de su vecino porque para una vez que apostó por presuntos jóvenes valores, le salió el tiro por la culata.

El de la edad no es el único problema. La cosa se agrava aún más con la eterna historia de no encontrar un jugador que comparta el puesto de base con Salgado de forma continuada. Y es que en los últimos años, ese puesto ha sido “de paso”.

Madina, JJ Jiménez, Uriz, Ciorciari, Koljevic, Stefanovic, Azofra y Huertas. Ocho jugadores en siete años. Ninguno ha estado aquí más de una temporada. Parece que esa dinámica se va a romper este año porque es casi segura la continuidad de Huertas, pero en junio próximo se marchará y estaremos en la misma situación de siempre: buscando un base que haga pareja con Salgado. El equipo no consigue tener continuidad en un puesto que es fundamental, el más importante.

Pero también empieza a tener otro problema grave y es que no es capaz de hacerse con los servicios de un cinco completo, con presencia tanto en defensa como en ataque. Weis lleva en el equipo desde el primer año en ACB, temporada 2004-05, y es un buen jugador defensivo, intimidador y reboteador pero en ataque… Además nunca ha tenido a su lado otro cinco específico, siempre han sido cuatros utilizados puntualmente como cincos, a excepción de los dos meses, al final de liga, que ha jugado esta temporada Mile Illic. Ahora parece que llega Guardia, un center, pero no es un jugador que vaya a hacerse con la titularidad del puesto ni por calidad, ni por edad. Estos dos asuntos llevan camino de convertirse en endémicos, en las señas de identidad del equipo.

Pero aún hay más. Resulta que esta nueva temporada los tres jugadores más “viejos” de la plantilla serán nacionales y eso nos pone en serios problemas de cara a cumplir con el famoso tema de los cupos. Habrá que ir buscando jugadores seleccionables que ocupen las plazas que irán quedando a medida que aquellos vayan saliendo del equipo. Y la cuestión es que el jugador nacional y de calidad es escaso y muy codiciado. Nuestro club tendría que entrar en la pugna con los grandes por hacerse con sus servicios y la desventaja en cuanto a ofertas atractivas sería palpable.

Si a todo esto les sumamos la inseguridad que está generando la crisis inmobiliaria en el patrocinio de equipos y la forma en que puede afectar al nuestro, en concreto, de cara a próximas temporadas, nos encontramos con un escenario bastante preocupante sobre el que nuestro club tendrá que moverse con pies de plomo.

Deja un comentario